¿DE QUÉ SIRVE?
Ustedes saben que no he vacilado en predicarles todo lo que les fuera de provecho, sino que les he enseñado públicamente y en las casas.
Hechos 20:20
Hechos 20:20
Hay quienes ven el predicar el evangelio como una carga, algo tedioso, una vía rápida a hacerse coger fastidio, cuando en realidad son buenas noticias, es información que a diferencia del fútbol o la farándula son provechosas porque no es solo entretenimiento sino consejos de vida para el presente y preparación para la eternidad. Porque si, esta vida con todos sus afanes y modas pasan rápidamente.
¡Todo es efímero aquí! Aunque nuestras mentes digan lo contrario, no tenemos más control de nuestras vidas que en éste preciso instante. Pero Dios quiere que tengamos vidas constructivas y felices en el presente, y una gloriosa vida eterna después de ésta.